
La formación superior universitaria o técnica es necesaria, ya sea de manera presencial, semipresencial o virtual.
Ya sea de manera presencial, semipresencial o virtual, hoy es necesaria la educación superior universitaria. La oferta educativa actual no deja excusas para regresar a las aulas; todo depende de tres cosas: voluntad de aprender, actualizarse y certificarse.
SEGMENTO PARA ADULTOS
En un contexto de alta competencia técnica y profesional, no resulta ser una novedad que la demanda de educación superior y especializaciones entre los jóvenes aumente cada año. Sin embargo, lo que ahora se nota es un crecimiento en el segmento “para adultos”, en gran medida por la necesidad natural del ser humano de aspirar a mejores puestos de trabajo y mayores remuneraciones.
“Esta demanda busca la especialización en tópicos de acuerdo a su ‘core’ profesional. En otros casos tenemos a quienes buscan cambiar de área laboral. Pero como la poca experiencia los limita, buscan llevar cursos que les brinden el respaldo necesario para migrar a una nueva área de trabajo”, afirma el profesor Oswaldo Morales, director de Educación a Distancia de ESAN.
Hernán Becerra Salazar, director ejecutivo de EDUCADIA, explica que la educación de los adultos debe responder a la formación continua, es decir, a lo largo de toda la vida. “Esta afirmación cobra fuerza en la medida que entendamos que los adultos ya no aprenden porque necesariamente están obligados o lo asumen como un deber, todo lo contrario, para ellos es un deseo, un placer en la medida que sepamos, como sistema educativo, responder a sus expectativas, sueños, anhelos, potencialidades, características, necesidades, estilos y ritmos de aprendizaje”, explica.
Agrega que el Ministerio de Educación lo entiende así. Por ello, considera como un avance importante que los planes y programas de formación, además de las guías metodológicas impulsadas desde la Dirección de Educación Básica Alternativa, fomenten y garanticen el derecho a la formación continua de los adultos.