Lunes, 24 de febrero del 2020

La importancia de mantener una alimentación saludable

Conoce cuáles son los alimentos que no pueden faltar en la lonchera y la dieta diaria de los estudiantes.

La importancia de mantener una alimentación saludable
La lonchera escolar no sustituye ni reemplaza las comidas principales de un escolar, solo complementa su alimentación diaria.

Para que un niño de primaria pueda estudiar, rendir sus exámenes y hasta jugar en el recreo, necesita de la energía y los nutrientes que aporta una buena alimentación. Por ello es importante brindarles una dieta equilibrada y saludable, así como incluir en su lonchera alimentos que les permitan potenciar su rendimiento escolar.

ETAPA CLAVE

Mónica Giacchetti, nutricionista pediátrica de la Clínica Delgado, explica que la educación primaria es una etapa de la vida donde los niños avivan su desarrollo intelectual, consolidan sus capacidades físicas, así como también sus hábitos alimentarios y estilos de vida saludables. “En esta etapa, el escolar crece entre 5 y 6 cm y aumenta de peso entre 3 a 3.5 kg por año. Además, la composición corporal también cambia”, señala.

Precisamente estos cambios que experimenta el niño, sumado a sus responsabilidades académicas, hacen necesaria una balanceada alimentación que les proporcione los nutrientes indispensables para esta etapa. “Si el organismo no recibe suficientes sustancias nutritivas, se producen problemas nutricionales que pueden afectar incluso su habilidad para aprender, comunicarse, pensar analíticamente, socializar efectivamente y adaptarse a nuevos ambientes y personas”, afirma Ana Veliz, jefa del departamento de nutrición de la Clínica Anglo Americana.


EN LA LONCHERA

En este contexto, la correcta elaboración de la lonchera adquiere un matiz importante ya que es el complemento de la alimentación diaria de un niño. De hecho, equivale entre el 10 y 15 por ciento de las calorías totales que debe consumir un menor al día, por ello debe ponerse especial cuidado en su preparación. ¿Pero qué alimentos debe contener una lonchera?

De acuerdo a las especialistas, una lonchera saludable debe estar compuesta por cuatro tipos de alimentos: formadores, energéticos, reguladores y bebidas. Entre los alimentos formadores se encuentran aquellos e origen animal que aportan proteínas, como es el pollo, la carne, el huevo, el queso, la leche, entre otros. Luego están los alimentos energéticos que incluye a los cereales, galletas integrales, pan, tubérculos y frutos secos.

Las frutas y verduras se encuentran dentro de los alimentos reguladores y las bebidas deben abarcar agua o refrescos naturales bajos en azúcar. “En la etapa escolar se da un importante crecimiento y, a la vez, se fortalecen hábitos y costumbres alimentarias que prevalecerán en la edad adulta. Consumir estos alimentos otorgará una alimentación equilibrada y saludable”, señala Karyn Reyna, nutricionista de la Clínica Ricardo Palma.

EN LA DIETA DIARIA

En el caso de los niños de educación primaria, la alimentación en casa tiene que ser balanceada, variada y con las porciones de acuerdo a la edad del niño. En el desayuno, por ejemplo, se debe incluir algún lácteo, cereales y fruta para que este sea completo. Además, es aconsejable añadir en la leche un poco de cacao en polvo, que aportará la energía necesaria que necesitan para empezar el día.

En el almuerzo, explica la nutricionista Ana Veliz, se deben incorporar verduras y hortalizas, que aportan potasio, magnesio, ácido fólico y fibra, así como pasta y arroz integral de preferencia. “Las legumbres también son indispensables y tienen que estar presentes al menos dos veces a la semana. En cuanto al consumo de carnes, deben ser magras e incluir pescado dos veces por semana por su alto contenido de omega 3 y omega 6, importantes para el cerebro”, afirma.

Tomando en cuenta que el organismo pierde agua por distintas vías y durante todo el día, es necesaria una adecuada hidratación para el correcto funcionamiento del organismo. Para niños de entre 6 y 12 años, se recomienda un consumo de agua de 1.6 a 2 litros, que puede aumentar dependiendo la actividad física, el clima o los problemas estomacales.

Es necesario recordar que si un niño crece bien alimentado previene enfermedades nutricionales tanto a corto como a largo plazo. En esta etapa, además, se debe promover los hábitos alimenticios saludables. “Y aquí el papel de los padres y del colegio, tanto de profesores como del comedor escolar, tiene un rol muy importante y decisivo”, puntualiza Giacchetti.

TOMA EN CUENTA

▶CEREALES. Disminuye el consumo de alimentos refinados y elige cereales integrales, por sus beneficios para la salud familiar.

▶A LA MANO. Elimina las tentaciones en casa y deja al alcance de los niños alimentos saludables como frutas, frutos secos u otros.

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