“El éxito no es el final, el fracaso no es la ruina”
Félix Rosenberg relata la importancia del arduo trabajo en estos 70 años de Consorcio Carolina.
Escribir sobre mis padres, fundadores de esta bella y tradicional empresa, no solo me emociona, sino que también me hace recordar con nostalgia la oportunidad que me dieron a mis 15 años de poder trabajar con ellos en los talleres de producción.
70 años ininterrumpidos conmemorados este mes de octubre, con la misma ilusión y pasión por el emprendimiento con el que mis padres osaron fundarlo en 1948. Pero, profundamente convencidos de que, como solían decir: “el éxito no es el final, el fracaso no es la ruina y el coraje de continuar es lo que cuenta”.
Mis padres Carolina y Edmundo vinieron al Perú luego de sobrevivir al terrible holocausto que los confinó, separados, en dos campos de concentración de la Europa nazi. Ambos entendieron cabalmente que la dicha de la vida consiste en como decían: “tener donde trabajar, alguien a quien amar y algo que esperar”.
Luego de la guerra, ambos fundaron su hogar en el Perú y constituyeron Carolina. La premisa fue hacer una empresa sólida, que evolucione de la mano con las nuevas tecnologías y la modernidad. Mis padres amaron entrañablemente al Perú, a sus hijos, a sus colaboradores y esperaron día con día el tren de la vida que los llevó hacia la trascendencia.
Quienes hoy conformamos la familia Carolina somos los herederos de aquel mensaje fundacional inspirado en la fortaleza, perseverancia, optimismo y fe en nuestras propias capacidades. Sabemos que somos muchas las manos y los corazones comprometidos que han contribuido a impulsarlo en el tiempo. Lo hacen ahora y lo seguirán haciendo mañana.
Mi homenaje a todo lo que significa el setenta aniversario de Consorcio Carolina. Agradezco en persona a todos y cada uno de nuestros colaboradores que han hecho suya esta forma de vida de quienes fundaron visionariamente este centro de trabajo, mi padre Edmundo y mi madre Carolina.
Estoy seguro de que seguiremos adelante. Que continuaremos siendo referentes en moda e imagen institucional. Que el guion de nuestra historia trascenderá. Gracias a toda mi gran familia Carolina.