Medicina: vocación sin límites

La pandemia del coronavirus COVID-19 ha puesto a prueba la vocación médica como nunca antes. También ha evidenciado la importancia de la investigación en medicina, el sentido de vocación y el deseo de ayudar a los pacientes.

“Actualmente notamos cuánta falta hacen los médicos en el mundo. Su rol en el cuidado de la salud es indispensable en todo momento, pero ahora es cuando se evidencia más su vocación”, comenta el doctor Roger Ayala Muñoz, director médico de Laboratorios Hersil, quien además trabaja en la atención de casos de COVID-19 en el Hospital San Isidro Labrador.

El desarrollo de nueva tecnología es fundamental para realizar diagnósticos más precisos y administrar mejor los tratamientos. Lo vemos ahora en la velocidad con que se ha decodificado el genoma del COVID-19 y en el desarrollo de vacunas en tiempo récord. Pero si hay algo que no debe cambiar a lo largo del tiempo es la esencia del profesional médico, su capacidad de observación, de análisis de los resultados y de decisión.

“La capacidad de mirar al paciente a los ojos, tranquilizarlo o consolarlo está cerca de ser reemplazada. Por eso el rol del médico es muy importante, ya que es un ser humano que atiende y brinda salud a otro ser humano”, refiere Manuel Gutiérrez, director de la carrera de Medicina de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC).

EL LLAMADO DE LA VOCACIÓN

¿Cómo saber si puedo ser un buen médico? Generalmente, las personas sienten la vocación desde temprana edad. “Les gusta ayudar, colaborar, trabajar en equipo, leer sobre temas médicos, saber cómo funciona el organismo humano. Ya cuando se estudia la carrera, al joven le fascina entender la maravillosa maquinaria humana”, comenta el doctor Ayala.

Además, el doctor Manuel Gutiérrez destaca otros intereses, como la necesidad de trascender, de ser reconocidos como miembros útiles de la sociedad y de alcanzar la seguridad económica. Pero la vocación de servicio y el deseo de aprender −afirma− son las características fundamentales.

Cabe señalar que, según el portal ponteencarrera.pe del Ministerio de Trabajo, los médicos jóvenes son los profesionales mejor pagados después de los profesionales en agronegocios. Los ingresos mensuales de trabajadores jóvenes que egresaron de Medicina entre el 2013 y el 2017 oscilan entre los S/2.500 y S/4.500.

El médico nunca deja de estudiar. En esta pandemia, por ejemplo, vemos la importancia de la investigación médica y el conocimiento actualizado. “El médico que deja de ser estudiante ya no es médico. Así como a muchas personas les gusta leer novelas, a los médicos les gusta leer textos de medicina, lo cual es muy necesario en su profesión”, advierte el doctor Ayala.

Esta carrera puede resultarte fascinante si te interesa la biología humana y si buscas ayudar a las personas. Solo toma en cuenta que los estudios son muy demandantes y es una profesión muy sacrificada.