¿Sabes cómo identificar los lunares malignos?

Los lunares suelen surgir en la infancia, pero pueden continuar apareciendo en tu piel hasta la adultez. Y aunque la mayoría de ellos te parezcan inofensivos, la verdad es que algunos podrían no serlo.

Para identificar cuál podría ser un lunar peligroso –es decir, cuál podría esconder un cáncer de piel- ten en cuenta el ABCD de los lunares:

Asimetría: El contorno de una mitad es igual que el otro.

Bordes: son irregulares.

Color: Disparejo.

Diámetro: es mayor a 6 mm.

Encontrar alguna de estas características significa que hay un riesgo incrementado de tener una lesión maligna.

UBICACIÓN

“El melanoma se localiza frecuentemente en el tórax, en la espalda y en los miembros inferiores, pero también se ha encontrado melanoma de localización en la planta de los pies y en la mucosa, sea conjuntival, oral y genital. Per se, el melanoma es una lesión mala, pero si se localiza en las mucosas, puede ser más peligroso”, indica el doctor Javier Manrique, jefe del departamento de Promoción de la Salud, Prevención y Control de Cáncer del Instituto Nacional de Enfermedaeds Neoplásicas (INEN).

Si sospechas de algún lunar, ve de inmediato al dermatólogo. De lo contrario, la identificación del melanoma en una etapa avanzada podría resultar fatal.

En efecto, Sandro Tucto, dermatólogo de la clínica Ricardo Palma, señala que una lesión detectada en su fase inicial, y cuando su espesor es delgado, se puede curar. De otro modo, podría haber una metástasis, es decir, la enfermedad se propaga a otras zonas, atacando otros órganos.

“La progresión en crecimiento lateral y luego en profundidad conlleva a su extensión a zonas lejanas. Alcanzan la circulación linfática o sanguínea, y se da la llamada metástasis, en donde después de un tiempo de evolución se formarán nuevos tumores”, explica.

EL DIAGNÓSTICO

Los médicos experimentados reconocen una lesión maligna con solo verla. Pero para la confirmación siempre hacen una biopsia, que además identifica el tipo de células afectadas y el grosor del tumor en la piel. Una vez hecho esto, el tratamiento, que puede incluir cirugía, inmunoterapia, terapia dirigida, quimioterapia y radioterapia, dependerá del avance de la enfermedad.

Usualmente, la cirugía es la primera opción, sobre todo en la etapa inicial de la enfermedad. Para ello se realiza una escisión no solo de la lesión, sino también de la piel aparentemente normal que se encuentra a su alrededor (es el llamado borde de seguridad), para evitar dejar células cancerosas.

Después se hace una tomografía computarizada o una resonancia magnética a fin de descartar la presencia de células cancerígenas en otras partes. “Si uno de estos exámenes resultara positivo, se procedería a extirpar todo un grupo de ganglios. Cuando la metástasis es aún más lejana y son tumores únicos, como por ejemplo el pulmón, se procede a su extirpación local”, agrega Sandro Tucto.

PREVENCIÓN

Y ya que el principal factor para la aparición del cáncer de piel es la exposición a la radiación ultravioleta, los expertos aconsejan utilizar bloqueador solar. De preferencia, con un SPF (factor de protección solar) de 50 y, por supuesto, reaplicarse el bloqueador cada cuatro horas. También es útil aplicarse el bloqueador media hora antes de exponerse al sol y nunca sobre la piel mojada.

Todas las personas deben seguir estas recomendaciones, pero sobre todo quienes tienen la piel muy clara, ya que están bajo un mayor riesgo de padecer cáncer de piel, pues su sistema para generar melanina (sustancia fabricada por la piel, que protege de los rayos ultravioleta) es más lento de lo normal.

La melanina es la sustancia que le da color a tu piel, es decir, la broncea cuando está bajo el sol. Las personas de piel muy clara no se broncean, solo se ponen rojas (se queman) y después vuelven a su color.

Ya lo sabes, mejor es prevenir que curar. Pero si de pronto ves un lunar sospechoso en tu piel, ve al médico de inmediato. Todo tipo de cáncer detectado a tiempo se puede curar.

TIPOS DE CÁNCER EN LA PIEL

► CLASIFICACIÓN

Los cánceres de piel se dividen en dos grandes grupos: los no melanomas y los melanomas. Para entender esta clasificación, debes saber que la piel está formada por tres capas, que son la epidermis (capa superior), la dermis (capa media) y la hipodermis (capa inferior).

► MELONOMAS

En la capa superior se encuentran los melanocitos, que pigmentan la piel ante la exposición del sol, y es en ellos que se puede originar el melanoma.

► NO MELONOMAS

El segundo grupo, los no melanomas, se originan en células distintas a los melanocitos y se dividen en carcinoma epitelial y carcinoma basocelular.