Lunes, 26 de marzo del 2018 COMUNICACIÓN POLÍTICA

8 errores de comunicación más comunes en los políticos

A la mayoría de nuestros políticos su poca preparación en comunicación verbal y no verbal los pone en serios aprietos.

8 errores de comunicación más comunes en los políticos
El caso del expresidente PPK se ha convertido en un manual de lo que no debe hacer un político en el campo comunicacional.

Ante la lamentable crisis de nuestro país, la población exige políticos preparados y listos para trabajar y sintonizar con el sentir del peruano. Por eso, examinamos con el experto Juan Carlos Ruiz Rivas docente de la Esvuela de Posgrado de la Universidad Continental, los errores de comunicación más comunes de nuestros obsoletos políticos tradicionales.

1. Sin coherencia. En la política más importante que decir lo correcto es hacer lo correcto. Uno de los grandes problemas es que los discursos de nuestros políticos no guardan coherencia alguna con sus actos, generando desprestigio, baja aprobación y escaso apoyo popular.

2. Actitud reactiva. Los políticos están acostumbrados a manejar crisis, a responder ataques mediáticos de políticos y periodistas; sin embargo, muy pocos son los que diseñan estrategias de comunicación que logren una conexión efectiva con la población.

3. Todo sobre su imagen. Muy pocos políticos recuerdan que están en sus respectivos cargos para representar a los peruanos que les dieron su voto. Uno de los errores típicos es olvidar que el foco del trabajo debe estar en el ciudadano. Lamentablemente, las estrategias de comunicación de hoy giran en torno de su propia imagen.

4. Sin público objetivo. Los políticos fallan al reconocer a los públicos a los cuales se dirigen, a lo que en marketing se conoce como stakeholders. Asimismo, ignoran por completo el concepto de un desarrollo de marca que incluya los programas públicos o acciones de su gestión.

5. Escasa preparación. Si algo caracteriza a la gran mayoría de nuestros políticos es su poca preparación en comunicación verbal y no verbal, lo que los pone en serios aprietos en muchas de sus participaciones públicas. Asimismo, muchos creen tener mucha experiencia, haciendo oídos sordos a los consejos de sus asesores.

6. Poca investigación. Cada vez son menos los políticos que realizan investigaciones válidas que les permitan conocer las percepciones de los ciudadanos y electores sobre su gestión. Lo que hacen, más bien, es abusar de la publicidad que creen resuelve todo.

7. Desfase temporal. Un gran número de políticos no son parte de la generación digital y, por ende, no entienden la dinámica de las redes sociales y lo que se debe hacer para construir una imagen y una relación a través de estas herramientas.

8. Caso emblema. El caso del expresidente PPK se ha convertido en un manual de lo que no debe hacer un político en el campo comunicacional, ya que cometió errores totalmente evitables y se resistió en todo momento a aceptarlos. Su poca capacidad para escuchar asesores y medir el impacto de sus palabras contribuyó para crear su imagen de corrupto y tecnócrata con dificultades para administrar eficientemente un estado al servicio de la gente.

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