Archivistas de profesión: entérate todo sobre esta nueva carrera
Lo que podría parecer un oficio extraviado en el tiempo, hoy se abre paso como una rentable opción.
Quizás te encuentres leyendo este artículo desde una tablet o una computadora y tengas tu celular en tu bolsillo, pero aunque te proclames amante de la tecnología tienes que aceptar que aún guardas una carta escrita a mano de tu primer enamorado o aún te emocionas al ver una foto tuya de pequeño. Y es que hay documentos que marcan hitos importantes en la historia de una persona y, definitivamente, deberían estar bien conservados.
En el caso de la historia sucede lo mismo: todo documento importante para el país, como el Acta de Independencia, se encuentra registrado en el Archivo General de la Nación. Pero ¿quiénes administran y gestionan las 216 cuadras de documentos que tiene el Perú actualmente?
ARDUO TRABAJO
“En todas las entidades públicas existen archivos, ya que se producen documentos día a día. Resguardar este patrimonio es sumamente importante para que se validen nuestros derechos y nuestras acciones. Los encargados de organizar estos documentos son los archivistas de profesión, quienes tienen la misión de conducir la gestión documental de cualquier organización pública o privada, durante el ciclo vital de los documentos”, explica Teresa Carrasco, jefe del Archivo General de la Nación.
La carrera de archivista en el Perú no es muy común. Sin embargo, es sumamente importante para nuestro desarrollo, pues son los documentos de archivo los activos que debemos de proteger para conocer a ciencia cierta que tan eficiente o deficiente fue una determinada gestión.
Hoy en día, esta carrera se puede estudiar en la Escuela Nacional de Archiveros (ENA), a nivel técnico, y en la Universidad Católica Sedes Sapientiae (UCSS), a nivel profesional.
Según Aída Mendoza, coordinadora de la carrera de Archivística y Gestión en la UCSS, la demanda de esta profesión es bastante y ella confía en que crecerá con el paso de los años. “No se puede dejar en manos improvisadas un activo tan valioso para las organizaciones, como es su información. Un documento puede ser vital para una empresa, para un ciudadano o para el Gobierno en su lucha contra la corrupción”, enfatiza Mendoza.
Si es que aún piensas que el egresado en archivística es el clásico joven rodeado de cerros de papeles en desuso, encerrado entre las cuatro paredes de su archivo, estás equivocado. Se trata de un profesional que supervisa, controla procesos, propone políticas de protección y se comunica constantemente con el personal que produce y gestiona administrativamente los documentos, para cuidar que estos reciban el tratamiento archivístico que corresponde, desde su producción hasta su destino final.
Debes tener en cuenta también el cambio que está trayendo la digitalización a esta importante carrera, que también está presente en el sector privado.
RELIDAD ARCHIVÍSTICA EN MÉXICO Y CHILE
► Extensión. El Archivo General de la Nación (AGN) mexicano cuenta con documentos que llegarían a medir 52 kilómetros lineales, concentrando en mayor medida documentos de los siglos XIX y XX.
► Reto. Sin embargo, la archivística en este país se encuentra en una fase estancada. Una de las falencias es la falta de una mayor coordinación del Estado con las entidades públicas para acceder a la información.
► Opinión. Para Ángeles Magdaleno, historiadora e investigadora mexicana, este problema se debe a que las élites mexicanas no tienen interés en desarrollar esta disciplina.
► Razones. “Ellos se resisten a tener documentos de archivo con información política, para ocultar definitivamente los casos de corrupción, como sucede en la mayoría de países de América Latina”, enfatiza Magdaleno.
► Al sur. El panorama archivístico en Chile está en proceso de modernización. Aún se encuentran en la creación de una ley de archivos que ordene la gestión documental de todos los ministerios y las diferentes entidades públicas.
► Problema. Si bien con toda la documentación del Archivo Nacional de Chile se trazaría una línea de casi 50 kilómetros, esto apenas representa el 20% de lo que debiera tener.
TECNOLOGÍA DE VANGUARDIA
Avance. El desarrollo de la tecnología ha ayudado a la inmediatez en el acceso a los documentos de archivos. Gracias a diversas aplicaciones informáticas en los archivos, los egresados de esta carrera pueden acceder a la información de manera más rápida.
Beneficio. “La tecnología es fundamental para el aprendizaje de los egresados. Con su uso podrán preservar los documentos y brindar soluciones para las necesidades del derecho a la información”, dice Teresa Carrasco, jefe del Archivo General de la Nación.
LA ENSEÑANZA DE LA ARCHIVÍSTICA EN LAS UNIVERSIDADES
Por: Marco Gozar Llanos
Consultor en Administración de Archivos de COINN Consultores Integrales en Archivos S.A.C.
En la actualidad se ha tomado conciencia de que la información es, junto con el recurso humano, uno de los recursos más importantes de toda organización. Toda vez que gran parte de la información de una organización se encuentra asentada en documentos de archivo, la necesidad de contar con personas especializadas en su gestión es un imperativo. Estas personas especializadas son los Archiveros.
Contar con universidades que ofrezcan la carrera profesional de Archivística nos permite tener profesionales con la capacidad para diseñar, participar y liderar proyectos de implementación de sistemas institucionales de archivos, es decir, de ser artífices del establecimiento de la estructura, lógica y física, que determina la creación, formación, evolución y decisión de la conservación permanente o eliminación de los documentos de archivo en una organización, con la finalidad de poder tener el control total y absoluto de la información que estos albergan.
En la actualidad solo existe una universidad, desde el año 2011, que ofrece la carrera de Archivística, lo cual muestra un gran espacio para que otras universidades puedan participar de esta oferta, lo que sumaría a los enormes esfuerzos por hacer que la Archivística tenga una presencia mayor, y acorde con su actual importancia, como carrera profesional.
Hasta el 2010, la Escuela Nacional de Archiveros, de la cual soy egresado, era la única institución que formaba ‘profesionales en archivos’ a nivel técnico, y muy probablemente a partir del 2017 vuelva nuevamente a ofrecer la carrera, de nivel técnico (4 años), por lo que nos encontramos en una coyuntura favorable.
¿Podría una organización tener una gestión eficiente si es que no utiliza eficientemente su información o no puede proporcionar oportunamente la información que les solicitan sus clientes? Esto es lo que garantiza la presencia de un archivero. El gran reto de las universidades es establecer una malla curricular acorde con las exigencias reales que la gestión moderna exige y con la fisonomía organizacional de las instituciones en el Perú.