¿Qué dicen los profesionales que llevaron un posgrado online?

“VALORÉ PODER MANEJAR MIS TIEMPOS”

Edwin Castro Dávila, gerente Comercial en Laboratorios Hersil y egresado del E-MBA de la UPC.

“Mi experiencia con el MBA fue muy buena. Valoré sobre todo el poder manejar mis tiempos. Mi trabajo es muy demandante y con el E-MBA no tuve problema, incluso viajé por motivos de trabajo y no interrumpí la maestría. Tuvimos dos semanas presenciales, a tiempo completo. Por lo demás, trabajamos en una plataforma desde la cual interactuamos con profesores y compañeros.

Teníamos material de lectura, clases y trabajos en grupo. Planteamos consultas, colgamos trabajos y podíamos ver los trabajos de todos. A través de un foro comunicábamos nuestras dudas al profesor y todos tenían acceso a esa información. Universidades del más alto nivel en el mundo dictan cursos y maestrías online. Esta es una manera de adaptarnos a los cambios”.

“ESCUCHABA CLASES DESDE MI CELULAR”

Vladimiro Zúñiga, gerente de Proyectos en Trianon S.A. y egresado del Diplomado en Energías Renovables en la Universidad ESAN.

“Anteriormente he llevado un diplomado presencial en Gerencia de Proyectos. Fue muy bueno, pero trasladarme desde San Isidro hasta Monterrico Chico, en Surco, era muy complicado, por el intenso tráfico. La modalidad online me facilitó las cosas en el siguiente diplomado que llevé. Desde que salía del trabajo, escuchaba las clases a través del celular. Eran clases en vivo, así que podía interactuar, y la clase empezaba con puntualidad. El último curso fue presencial, así que todos nos conocimos. Y nunca me llené de papeles, todo el material estaba en digital. Podíamos hacer trabajos en grupo normalmente. Tenía un compañero que vivía en Piura. Él no hubiera podido llevar este curso de otra manera”.

“FUE UNA PRUEBA DE MI NIVEL DE COMPROMISO”

Gustavo Morales, director académico de la Escuela de Tecnologías de la Información de Cibertec y egresado de la Maestría en Gestión Educativa en la Universidad Europea de Madrid.

“Ser alumno online fue una prueba de mi nivel de compromiso. En cuanto a las ventajas, la flexibilidad horaria te permite administrar tu tiempo y no requieres movilizarte hasta el lugar de estudios. Si bien en una clase presencial la interacción es inmediata, en las online muchas veces la interacción es asíncrona y las preguntas pueden tener respuesta en horas o días, salvo en sesiones de videoconferencia. Sin embargo, lo positivo es que la plataforma de consultas está abierta casi siempre. Un punto importante es que si no agendas correctamente, puedes perder algunas clases, como me pasó a mí al comienzo”.

“PODÍA VOLVER A REVISAR LOS CONTENIDOS”

Jorge Luis Espinoza, administrador de contratos en Provías Nacional y egresado de la Maestría en Gerencia Pública en la Universidad Continental.

“La modalidad semipresencial se ajustó a mis necesidades debido a que por mis obligaciones laborales tengo poco tiempo libre, pero la gran ventaja era que se adaptaba a mis horarios. Además, en todo momento podía volver a revisar los contenidos o las exposiciones en línea, porque las clases estaban siempre disponibles en el aula virtual. Tuve algunas clases presenciales cada cierto tiempo. Por otro lado, la plataforma era muy amigable, había chats y foros de discusión. Igualmente, hacíamos trabajos individuales y grupales Pero, eso sí, estudiar online implica tener disciplina y responsabilidad”.