Jueves, 20 de febrero del 2020

Gestión Pública: retos y perspectivas

Para una gestión pública eficiente se necesitan profesionales que asuman los retos que implica la modernización del Estado.

Gestión Pública: retos y perspectivas
Esta maestría brinda los conocimientos y habilidades que les permita contribuir con las reformas del sistema estatal.

Lograr un Estado moderno y descentralizado, que esté basado en una gestión eficiente, transparente y que brinde servicios de calidad, es uno de los principales desafíos que tenemos como país. Si bien el Estado peruano inició hace varios años el proceso de modernización, el camino aún es largo. Y se hace cada vez más fuerte la necesidad de contar con profesionales que calcen con este nuevo escenario, se adapten a los cambios y asuman los desafíos que implica este proceso.

RETOS DE LA MODERNIZACIÓN

Elsa Galarza, directora de la Escuela de Gestión Pública de la Universidad del Pacífico (UP), afirma que el Perú es un país que merece un desarrollo sostenible sobre la base de su riqueza y diversidad en recursos naturales y culturales. En ese sentido, explica que uno de los retos más importantes de la gestión pública es poder administrar esa diversidad de manera eficiente y lograr que se vuelva real esa potencialidad de desarrollo que tienen todas nuestras regiones.

Para la especialista, la informalidad existente en el Perú es reflejo de una situación en la que no se ha podido resolver el problema concreto del ciudadano. “Por ello la gestión pública tiene retos fundamentales como: lograr un uso eficiente de los recursos, tener impacto positivo en la vida del ciudadano, generar oportunidades para la innovación y desarrollo productivo, e implementar mecanismos de control y transparencia”, señala.

La informalidad desde la percepción de Galarza encuentra eco en la opinión de César Fuentes, director de la maestría en gestión pública de Esan, quien agrega que la informalidad, trae consigo temas de mal manejo en la gestión o corrupción, y también refleja bajos niveles de educación, de capitalización por empresa y mercados relativamente pequeños.

“En la medida de que formalicemos al país, los niveles de corrupción e informalidad irán bajando. Aquí hay un desafío. No solo es un tema estrictamente legal o tributario; es un tema de productividad. Por eso el Estado debe trabajar en tres frentes: mayor educación, mayor capacitación y mayor educación financiera”, explica Fuentes.


PROGRAMAS DE FORMACIÓN

Es este contexto, en que se hace necesaria una gestión pública más profesionalizada, orientada a la eficiencia y resultados, es importante también que los gestores públicos puedan responder a estas nuevas necesidades. Por ello, diversas escuelas de posgrado han diseñado programas de maestría que buscan formar profesionales que lideren este cambio y a su vez aporten al fortalecimiento y modernización de las instituciones del Estado.

El programa que se ofrece en Esan tiene enfoque multidisciplinario. Esto le permitirá al estudiante mejorar su comprensión e intervención en la dinámica del sector público e implementar nuevas propuestas de valor para las organizaciones con herramientas de management, con especial impacto en la gestión económica y financiera.

La UP, por su parte, brinda una maestría en gestión pública con doble certificación. El programa privilegia el aprendizaje mediante la aplicación directa de las herramientas de gestión que demandan los sistemas administrativos. Además, aspectos conceptuales y analíticos para el diseño e implementación de políticas públicas, y el desarrollo de investigación aplicada orientada a mejorar el desempeño de las instituciones públicas y generar buenas prácticas.

En el caso de la Universidad Continental, la maestría en gerencia pública está inspirada en la búsqueda de acercar al Estado a lo que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha diagnosticado a través del Programa País. “Destacan en este sentido áreas de mejora como el centro de gobierno, la planificación estratégica, el control de gestión y evaluación de políticas públicas, gobierno abierto, gobierno digital, y las nuevas formas de contrataciones públicas”, señala Cesar Chanamé, director del Centro de Gestión y Políticas Públicas de dicha Universidad.

Para los especialistas, la maestría en gestión pública es una especialización con demanda creciente, dado que el déficit de estos profesionales es aún grande. Pero para acceder a esas oportunidades se requiere de una formación sólida y moderna adaptada a nuestra realidad.

SEPA MÁS

1. COMPONENTE INTERNACIONAL

Algunos programas en gestión pública ofrecen la opción de llevar un curso presencial en el extranjero o asistir a seminarios internacionales.

2. PERFIL DEL EGRESADO

Los profesionales serán capaces de liderar equipos de trabajo, evaluar y gestionar los riesgos de la gestión pública así como diseñar e implementar políticas públicas.

3. MÁS ESPECIALIZADOS

Algunas universidades brindan al estudiante la posibilidad de elegir una especialización y obtener un certificado adicional.

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