
En los últimos dos años el m2 de departamentos se incrementó en menos del 3%. Veámos cuál es la proyección para este año.
El boom inmobiliario experimentado en la capital y otras importantes ciudades del país revalorizó terrenos, casas, departamentos y locales comerciales, lo que atrajo a un gran número de inversionistas y personas a invertir en dicho sector. Sin embargo, ante el ligero freno de la economía en los últimos dos años, surge la pregunta de si continúa siendo inteligente adquirir inmuebles y terrenos esperando una revalorización de cara al futuro.
Para Paul Lira, director académico del campus Monterrico de la UPC, la situación es favorable para invertir en este tipo de bienes por dos razones. “En primer lugar, es una inversión tangible. Por otro lado, en comparación con otros activos, la revaloración en tiempos de expansión económica es bastante más pronunciada que la disminución del valor en épocas de contracción”, afirmó.
No obstante, una de las desventajas es que no es fácil convertir el bien en efectivo para afrontar algún tipo de emergencia en el corto plazo. “Ante esto, lo inteligente es diversificar el dinero que se piensa invertir en tres: efectivo, activos financieros (como acciones o fondos mutuos) e inmuebles. Lo recomendable es que lo destinado a este último sea entre el 25% y 30% del monto disponible”, aconsejó el especialista de la UPC.
INTERESANTES OPCIONES
Las posibilidades para las personas que deseen adquirir un inmueble son numerosas: departamentos, terrenos, casas y locales comerciales. La elección depende del comprador y del plan que tiene con el inmueble. “Cada uno tiene sus ventajas: los terrenos pueden revenderse con el correr del tiempo o ser utilizados para autoconstrucción; los departamentos son muy interesantes ahora porque integran un concepto de calidad de vida y esparcimiento que no tenían antes, y las casas son una buena opción solo si se presenta una oferta muy seductora”, señaló Marcel Cerdán, gerente comercial de Paz Centenario.
Por su parte, los locales comerciales continúan siendo la mejor opción en términos de rentabilidad. Según un informe de W Capital SAFI presentado el año pasado, el retorno de un local comercial para arrendamiento puede estar entre el 8% y 12% si se ubica en una zona con mucho movimiento o potencial. El punto en contra es que se necesita mayor capital para adquirir este tipo de bienes, debido al ticket más alto del metro cuadrado.
ZONAS CON DEMANDA
Los especialistas coinciden que un factor importante es la ubicación. Según estimaciones de Centenario, la demanda inmobiliaria no atendida en nuestro país podría producir una revalorización muy sostenida de terrenos en una gran cantidad de ciudades.
“Es en la capital donde se tiene la mayor demanda, siendo Lima Norte la zona más dinámica, por la oportunidad de expandir la ciudad de forma ordenada. En Carabayllo, por ejemplo, el metro cuadrado está alrededor de los S/ 930. Por su parte, en el interior del país, el precio promedio es de S/ 565, con Arequipa y Trujillo a la cabeza (precio aproximado de S/ 665 x m2), seguidas de Huancayo y Tacna (S/ 590), Chiclayo (S/ 535), Piura (S/ 500) e Ica (S/ 450)”, puntualiza Carlos Montero, gerente de la División de Urbanizaciones de dicha empresa.