Estas personas también llevan sobre sus hombros una fuerte carga emocional. Desde la psicología, te presentamos algunos consejos.
Aunque la ciencia médica ha avanzado mucho en las terapias contra el cáncer, cuando una persona recibe ese diagnóstico se asusta mucho, siente impotencia, frustración y desánimo. También sus seres queridos se afectan, pero necesitan seguir adelante.
QUÉ HACER
Una manera de enfrentar esta situación es a través de la terapia psicológica. Los psicooncólogos realizan sesiones familiares o individuales para explicar qué deben esperar del paciente y cómo apoyarlo cuando le sobrevengan los temores al tratamiento, a la caída del cabello, al hecho de saber que su familia sufre, etc. Además, los expertos sugieren dejar que el paciente hable, escucharlo con atención y no fingir que todo está bien (aunque tampoco hacer un drama). “Es saludable abrirse a la honestidad emocional sin hacer sufrir al paciente. Si eres auténtico, le permitirás hacer lo mismo sin miedo”, afirma la psicooncóloga Martha Paredes Delhonte, quien apoya a la Liga Contra el Cáncer.
También se les pide a los familiares hacer con el paciente lo mismo que hacían antes de conocer la aparición de la enfermedad, siempre que su condición de salud lo permita.