Matemáticas: ¿cómo enseñan hoy los profesores?

Los recientes premios obtenidos por un grupo de escolares peruanos participantes en diversas competencias matemáticas de nivel internacional, llaman la atención sobre esta disciplina que generalmente ha sido mirada con recelo.

Es cierto, las matemáticas no son muy populares, y quien puede evitarlas en la escuela o en la universidad, pues lo hace. Y sin embargo, resultan ser de gran importancia porque sirven para desarrollar estructuras mentales que nos permiten razonar y crear estrategias para resolver los desafíos de la vida.

MAYOR DINAMISMO EN LAS MATEMÁTICAS

El doctor en Educación Isidoro Ruiz Arango, profesor en Matemática y Estadística de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), afirma que en estos tiempos de alta competitividad, el aprendizaje de la matemática ha cobrado mayor importancia y se ha hecho un curso mucho más dinámico respecto a la metodología de hace 30 años.

“Antes, la forma de aprender era mediante el razonamiento, la resolución y la respuesta a los problemas. Es decir, había mucho de memorístico por las fórmulas que aprender. Pero hoy la situación ha cambiado. Actualmente, lo que se enseña son mecanismos para ir desarrollando capacidades y competencias”, destaca.

Por eso, actualmente se dispone de diversos recursos didácticos, incluyendo los audiovisuales, así como juegos. Asimismo, se apela a hechos motivacionales o de la experiencia diaria del participante.

Y luego ya viene la parte abstracta, en la que se desarrollan los conceptos y se van modelando a través de una serie de ejercicios. Finalmente, se desarrollan las aplicaciones en base a esos mismos conceptos y propiedades estudiados.

“Sin embargo, estas técnicas tienen que ver con la facilidades pedagógicas disponibles, así como del propio perfil de los estudiantes. Ese factor hace que en algunas zonas populares con menos recursos sea un tanto complicado aplicarlas, especialmente en el área alto andina, donde casi no hay tecnología”, agrega.

REFLEXION DEL EXPERTO

Viviana Saavedra, directora editorial de Editorial Norma, coincide en que el enfoque de las matemáticas ha variado de lo tradicional, que privilegiaba la memoria y la repetición, a lo actual que incluye un trabajo mucho más serio y orientado a desarrollar competencias entre los estudiantes.

“Es en base a lo que la persona sabe y conoce, con lo que puede hacer. Es decir, se aprende con experiencias de lo cotidiano”. La metodología de las matemáticas para la vida se basa en el enfoque de la resolución de problemas reales, destaca.

Además, explica que si bien las fórmulas matemáticas son imprescindibles en este ejercicio, el verdadero impulso está en la reflexión del educando sobre cómo se hace la fórmula. De esta manera, se evita resolver un problema de manera mecánica y se llega al verdadero entendimiento.

Por eso, el tema de la motivación contextualizada es importante. Donde el estudiante debe abordar el aprendizaje a partir de hechos concretos. De ahí surge una apropiación de los contenidos más cercana al estudiante. “De memoria lo puedes repetir, pero si tu memoria falla ya no vas a saber qué hacer”, agrega. Sin embargo, si el ejercicio tiene significado para el estudiante, lo comprenderá mejor y le servirá para razonar en el día a día.