
Su labor para conservar los bienes inmuebles con valor cultural de su distrito fue premiada.
Preservar los inmuebles reconocidos como bienes culturales o con valor arquitectónico es uno de los grandes retos que enfrentan las autoridades de nuestra ciudad. Para encarar este problema, la Municipalidad Distrital de Miraflores implementó un mecanismo que permite al vecino que es dueño de un inmueble declarado bien cultural transferir los derechos sobre los aires.
El constructor que adquiere estos derechos puede aumentar una determinada cantidad de pisos a su desarrollo inmobiliario. Por su parte, el vecino se compromete a restaurar el predio histórico. “La ciudad debe recoger la historia del distrito, y nuestros vecinos desean conservar las casonas históricas por lo que representan para Miraflores”, afirma Sergio Meza, gerente municipal del distrito.