¿Decidiste estudiar en el extranjero? 5 consejos para adaptarte

Con solo 18 años, Leonardo Carpio dejó su vida en Perú y se mudó a Alemania para estudiar Economía en la universidad Rheinische Friedrich-Wilhelms Universität Bonn. Ha pasado poco más de tres meses desde su partida y ya conoce la cultura, comparte sus días con otros estudiantes y ha viajado por su región, “sin gastar mucho” –dice- gracias al ticket que le otorga el gobierno y que le permite usar algunos medios de transporte sin pagar.

Para alcanzar su sueño europeo, Leonardo obtuvo el bachillerato alemán (Abitur) en el colegio, dominó el idioma y eligió un centro de estudios en el que gastaría casi lo mismo e incluso menos que si estudiaba en el Perú. “El nivel de enseñanza en Alemania es muy bueno y mi universidad está entre las 100 mejores del mundo. Sin embargo, los costos son accesibles. El gobierno alemán pide un pago anual de 9.000 euros que serían unos 750 euros al mes para la manutención del estudiante”, precisa.

Con todo eso cubierto, el adolescente puede pensar que ya tiene el camino resuelto pero no. La psicoterapeuta de niños y adolescentes, Miriam Mejía Morin, vivió en carne propia esta experiencia cuando el 2013 migró con toda su familia a Indonesia. Además de la barrera idiomática, porque muy poca gente hablaba el inglés de forma fluida, se encontró con costumbres y climas distintos.

“Vivimos la lentitud y aglomeración del tráfico a niveles intensos, con dos o tres horas en el auto de manera frecuente y regular. Hubo fuertes tormentas de verano que inundaban calles y avenidas e interrumpían la vida de toda la ciudad. Los chicos extrañaban a sus abuelos, sus amigos, su idioma, su barrio, todo parecía difícil de superar”, manifiesta Mejía. Sin embargo, el Sudeste Asiático resultó la mejor escuela para sus hijos después de varios meses de adaptación.

A continuación, estos dos casos nos brindan algunos consejos para mantener la mente abierta, evitar el choque cultural y fortalecer el carácter independiente y autónomo. Recuerda que las lecciones no solo se aprenden en las aulas sino en el día a día.

CONSEJOS PARA ADAPTARTE

1. Averigua sobre los estudios a realizar pero también sobre los aspectos culturales, la economía y la política del país elegido antes de partir.

2. Registra lo vivido en un diario a fin de analizar las experiencias, las diferencias y cosas en común que existan para motivar la tolerancia. Además considera necesario contar con espacios para meditar y tomar un respiro mientras te adecúas.

3. Realiza actividades extracurriculares y sociales. Practicar algún deporte o ingresar a talleres dentro de la universidad sirven de puente para integrarse y conocer personas con intereses comunes. También propone la inclusión a grupos de estudiantes extranjeros en las redes sociales.

4. Asume múltiples responsabilidades y poner a prueba tu grado de independencia. Deberás hacerte cargo de pagos, matrícula, transporte, salud y demás. Tendrás que familiarizarse con los sistemas del país y de la universidad. Ayudaría mucho si te hospedas en la residencia universitaria pues tendrá mayor acceso a todos estos servicios.

5. Aprende a mantener un orden en la vivienda, a efectuar actividades del hogar, a cuidarse a si mismo y a actuar con responsabilidad en situaciones como fiestas o reuniones ya que nadie estará ahí para auxiliarte.

TOMA NOTA

Infórmate sobre los destinos donde consideres que puedes desenvolverte bien. Considera el idioma, las universidades o los centros de estudio que puedas solventar y los programas curriculares y extracurriculares.